De Jueves a Domingo… la contemplación de la nada

2012

de jueves a domingoLa nueva tendencia del cine latinoamericano parece ser el realizar la contemplación de la nada. Un cine que mal entendiendo el concepto de cine contemplativo lleva éste a extremos tales que lo único contemplamos es la muerte del cine, la nada que no conmueve, que no atrapa, que no afianza. De Jueves a Domingo de Dominga Sotomayor se inscribe en esa tendencia.

De Jueves a Domingo muestra el viaje de una familia que está desintegrándose a nuestros ojos. Un viaje a la playa donde los hijos no comprenden que es el adiós de su familia, el padre se irá de casa acabando el mismo. Cuatro días donde la familia convivirá en el carro sin poder evitar el inevitable final.

La chilena Dominga Sotomayor nos lleva por el desierto chileno en busca de una playa que nunca llega, de un interminable viaje donde los paisajes se pierden en la ventanilla, donde el aburrimiento y hastío de los menores les impide percatarse del fracaso de la relación de sus padres.

La pequeña protagonista de la historia es lo más destacado, con ese enfoque justo de precocidad e inocencia, sabe algo está mal con sus padres, puede percatarse de que hay algo raro entre su madre y su amigo francés pero no puede definir que es, ni cuando escucha los ruidos de una pareja teniendo relaciones sexuales por su mente puede pasar que su madre está engañando al padre o estos mantienen quizá la última relación sexual de su compañerismo.

Una película que disfrazada de recuerdos infantiles en realidad no dice nada en el fondo, aburrida, sin mayor sentido que el sentir algo falta, algo queda incompleto. 

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