Hermia & Helena, el regreso de Matías Piñero

2017

helenaandhermiaEn el filme Hermia & Helena, Camila y Carmen, jóvenes amigas argentinas, han compartido el mismo departamento neoyorquino en el que ambas se dedican a la traducción, lo que les ha permitido vivir ahí becadas y ampliar su círculo de amistad, afecto y sexo, ahora en el otro lado del continente. Una regresa a su país donde se quiebra ante la posibilidad de haber jodido el amor de su vida, la otra en Nueva York se entrega a la libertad del goce, a recoger las migajas sentimentales que ha dejado su amiga y a conocer a su padre –a quien nunca ha visto en la vida.

El proyecto cinematográfico del joven maestro Matías Piñeiro, del que Hermia & Helena es su última entrega, aunque afincado en raíces shakespearianas (todos los personajes –realizadas con actores maravillosos y entrañables- de sus ya cuatro filmes últimos, montan en algún momento una pieza del bardo, que acaba convirtiéndose en su espejo, su guía o su antítesis), tiene más que ver con el arte y la literatura francesa que con la inglesa, pues toma de referentes para crear su universo meta-literario, tanto la profusión de historias de un Marcel Proust (con varias historias caudalosas dentro de una misma historia que narra el devenir sentimental de un grupo teatral, que se mueven a través de distintos brazos protagonistas) como la utilización del cine de prosa de Eric Rohmer y sus Cuentos Morales (pues sus películas son, al igual que las mencionadas, gozosas fábulas de amor, sexo, literatura y sus inconveniencias). Y si seguimos rascando, igual podemos encontrar a Bergman con su teatro dentro del cine, a Ozu con su dedicatoria a su actriz Setsuko Hara y sus diálogos de filmes protagonizados por dicha intérprete y así, ad infinitum, cantidad de referencias culturales que han bordado y desbordado la historia del cine.

Cada uno de estos filmes se puede ver de manera independiente, pero recomiendo que busquen todas… Pero si me preguntan si esta es una película con las mismas constantes estilísticas de las otras, les tendré que responder que sí… y que no. Aquí, como dijo en la charla en que presentó su película, el rompecabezas al principio de la historia  es uno, pero conforme avanza y a través de los puntos de vista de los distintos personajes, se desarma y rearma, siempre bellísimo (estupenda fotografía a paisajes modernos urbanos y a rostros imperferctos), con distintos ritmos y estrategias narrativas que van señalados ya sea por una edición vertiginosa, que por una contemplativa, o con una película poética de estilo mudo dentro de la película o con una secuencia de disolvencias sobre disolvencias ¿Cine culterano? Sí. ¿Entretenido? Claro. ¿Encantador? Siempre.

No vaya, corra a ver Hermia & Helena exhibiéndose de manera efímera en el FICUNAM 2017.

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