Tamara es una mujer de casi cuarenta años, con retraso mental por falta de oxigenación al nacimiento, pero que sobrevive en lo cotidiano gracias a rutinas que, incluso, le permiten tener un trabajo de poca demanda en una vieja tostadora de café en el centro de la ciudad. Vive en un barrio de bajos recursos y, aunque no lleva relación con sus vecinos, todos saben de su existencia y condición.
La otra mujer es Doña Meche, setentona que vive sola en una casa en el mismo barrio pobre en que vive Tamara. Sus hijos se fueron de ilegales a Estados Unidos y, desde entonces, se desentendieron de ella. Doña Meche tiene un puesto de quesadillas gracias al que sobrevive día a día, pero que para mantenerlo tiene que pagar sobornos constantes a los policías del barrio. Es una mujer adolorida, con achaques, que su difícil vida la ha convertido en una persona amargada y huraña.
CineNT.com tuvo la oportunidad de platicar con Lucía Carreras sobre Tamara y la Catarina, durante el Festival Internacional de Cine de Los Cabos 2016.
Carreras comentó que la cinta se centra en la condición de la mujer sola, debido a que su enfoque como cineasta la ha llevado a enfocarse en hablar de las mujeres, de sus sentimientos, de su condición como mujeres.
Respecto a la situación actual del país, la directora señaló que sería maravilloso que el cine o el arte tuviera el poder de cambiar sociedades, aunque en realidad no es así; sin embargo, comentó que el cine es un reflejo de la sociedad en la que se vive, es un reflejo del cómo somos como pueblo y a la vez es nuestra memoria colectiva.
Añadió que “Tamara y La Catarina si bien no habla de lo que sucede en el país como tal, habla de una realidad mexicana y a la larga va a representar lo que era nuestra sociedad.”
Respecto a la construcción del personaje, Carreras señaló que el personaje se abordó con mucho respeto y sobre todo cuidando que no se hiciera un retrato infantil ni caricaturesco.
Los invitamos a ver la entrevista que realizamos a Lucía Carreras, al igual que el Q&A de Tamara y la Catarina.
(Foto cortesía de Christian Valencia)
