Pareciera que el cine independiente mexicano sólo tiene dos opciones, o se va por el lado de la involución del lenguaje cinematográfico al hacerse contemplativo, o aspira ser un cine de aire intelectual. Generación Spielberg de Gibrán Bazán apuesta por la segunda opción, lo que se agradece ya que a pesar de no ser una propuesta que logre ser perfecta, se aleja de las modas contemplativas que sólo parecen interesantes al que las hace.
Cinco historias: Una psicoanalista termina con su amante y pretende suicidarse en el baño de su casa. La amante se encierra en el trabajo y busca resistir el dolor. Un grupo de escritores llega a dar una serie de conferencias y en la espera se emborrachan en el estacionamiento del lugar. La hija de un abogado del sistema se queda encerrada con dos hombres en un elevador. Dos amantes deciden pasar 24 horas bajo las sábanas sin dejar su protección pase lo que pase.