Inusual es la palabra que en primera instancia se puede asociar a la intervención de Eli Roth en una película como “La Casa con un Reloj en sus Paredes” (The House with a Clock in Its Walls), la razón salta a la vista ya que, como director, Roth ha trazado una filmografía impulsada por historias de terror hiperviolentas plagadas de escenas desagradables y muy gráficas, en este sentido, “Hostal” se erige como su película más emblemática. Sin embargo, su esencia violenta también ha quedado impregnada en los personajes que ha interpretado como actor, ahí está el sanguinario sargento Donnie Donowitz mejor conocido como el “Oso Judío” en “Bastardos sin Gloria“de Quentin Tarantino. Pero, si se mira con detenimiento, la película familiar de clara vocación fantástica de Eli Roth no está tan alejada de sus intereses temáticos.
Adaptando la novela homónima del escritor John Bellairs, Roth explora un mundo mágico dotándolo de elementos amenazantes para crear una fantasía espeluznante que funciona, por un lado, como un entretenimiento para niños con más sustos de los que se podían intuir y, por el otro lado, elabora una experiencia disfrutable, divertida y muy creepy para la audiencia adulta que gozará de su particular humor negro e hipnotizante diseño de producción… además de que también se llevaran algunos sobresaltos genuinos.
La historia sigue a Lewis Bernavelt (Owen Vaccaro), un niño que, tras quedar huérfano, se mudará a la casa de su tío Jonathan (Jack Black), un mago que comparte su encantada residencia con su amiga, una hechicera muy avanzada llamada Florence Zimmerman (Cate Blanchett). Mientras Lewis trata de adaptarse a su nueva vida y escuela, las cosas en el hogar se tornan muy misteriosas una vez que descubre que su tío deambula por la mansión en las noches en busca de un artefacto oculto entre las paredes, además de que, para combatir el tedio, lanza un conjuro que, accidentalmente, revivirá a un peligroso mago de su tumba.
Ambientada en la década de los 50, "La Casa con un Reloj en sus Paredes" acierta en la creación de su atmósfera gracias a la mancuerna que hace la banda sonora con el diseño de los sets y el vestuario; Roth entiende a la perfección que se trata de una aventura divertida con visos oscuros, sin embargo, ha sido justamente la temporalidad en la que se ubica la historia lo que le ha permitido explorar un horror más sofisticado, menos directo y visceral al que ha acostumbrado a su audiencia y más cercano al relato gótico, aquí lo aterrador lo construye con pausas, tensión y figuras como payasos, máscaras o incluso vitrales que adquieren formas siniestras.
Cierto es que "La Casa con un Reloj en sus Paredes" no inventa el hilo negro de las historias relacionadas a magos y niños que están descubriendo sus poderes, incluso podría parecer llena de clichés (¿la desventaja de tener una adaptación tardía?), pero Roth ha logrado infundirle aires ingeniosos que, acompañada de buenos efectos especiales, los hilarantes toques de comedias, el carisma de su elenco (mención especial para Owen Vaccaro y Kyle MacLachlan, de hecho, la aparición del último es de lo más disfrutable en una película de por sí encantadora) y una atmósfera tenebrosa convierten en novedoso un relato que se disfruta de principio a fin.
Los invitamos a ver el tráiler.
“La Casa con un Reloj en sus Paredes” (The House with a Clock in Its Walls)
La historia cuenta el mágico y escalofriante relato de un niño de 10 años llamado Lewis (quien se muda a la vieja y rechinante casa de su tío, la cual cuenta con un misterioso reloj. Pronto, la aburrida y tranquila vida de su pueblo se verá interrumpida cuando accidentalmente, Lewis despierte a magos y brujas de un mundo secreto.
Director: Eli Roth
Guión: Eric Kripke
Basado en la novela homónima de John Bellairs
Con: Jack Black, Cate Blanchett, Owen Vaccaro, Renée Elise Goldsberry, Sunny Suljic, Kyle MacLachlan
Distribuidor: Universal Pictures
Fecha de estreno: 21 septiembre 2018 (Estados Unidos) 26 octubre 2018 (México)
País: Estados Unidos 2018
Duración:105 minutos
