En la realidad planteada por el segundo largometraje para la pantalla del realizador italiano Piero Messina (The Wait), no solo es posible recuperar y conservar los recuerdos de una persona fallecida, sino además (si algún familiar cercano así lo desea), dichos recuerdos se pueden implantar temporalmente en la mente y cuerpo de otro individuo, y hacer una simulación para hacer creer al “retornado” que sigue con vida. El objetivo de esta acción que se puede ver como inmoral y cruel obedece a una razón de trasfondo compasivo: ayudar a aquellos cuya pérdida de un ser amado es demasiado insoportable, y necesitan algo que no solo les permita sobrellevarla, sino también sobreponerse gradualmente a ella e incluso les conceda algún tipo de cierre.
Aeternum es la empresa que proporciona ese peculiar servicio a quien lo solicite, usando una tecnología llamada Another End y buscando sujetos compatibles para llevar a cabo el procedimiento. Y Ebe (Bérénice Bejo) es la encargada de administrar esas solicitudes; de asignar a los Anfitriones (los cuales rentan sus mentes y cuerpos por un tiempo limitado) donde serán alojarán los Ausentes (es decir, los recuerdos y “consciencia” de los fallecidos); y procurar no rebasar el tiempo asignado a cada uno, ya que ello puede tener consecuencias en el huésped. Y trata de conducirse en su labor con diligencia y ética.
Todo eso cambia cuando entra en escena su hermano Sal (Gael García Bernal), quien perdió a su pareja trágicamente en un accidente automovilístico, y está profundamente deprimido. Ebe le sugiere usar los recuerdos de su amada e implantarlos en el cuerpo de otra mujer (Renate Reinsve). Al principio él se muestra renuente a fingir que la extraña frente a él es su esposa. Pero gradualmente comienza a aceptar el “juego” y a compenetrarse con la Anfitriona. Ello desemboca en una especie de extraña fascinación con esta última, lo cual le hace pedirle a su hermana que rompa las reglas y le conceda más tiempo con ella. Y al acceder, desencadenará una serie de eventos que conducirán a situaciones y revelaciones inquietantes, donde Sal se cuestiona si su obsesión tiene que ver con los sentimientos hacia su esposa, o si la Anfitriona está despertando algo nuevo en él.
Si en Eterno resplandor de una mente sin recuerdo (Gondry, 2004), se planteaba que las personas deseaban borrar sus memorias dolorosas albergando la esperanza de conseguir un nuevo comienzo, en Un final diferente (Another End, Italia-Francia-Reino Unido, 2024) ocurre lo contrario: los personajes se aferran a su dolor cual si se tratase de una adicción, y de alguna forma, el servicio ofrecido por Aeternum intenta funcionar a modo de paliativo para ayudar a eliminarla, algo así como el proceso de desintoxicación de algunas drogas a base de metadona. Pero en ocasiones (como el caso de Sal) esto parece tener un efecto contraproducente. Y a través del trío protagónico Reinsve-García Bernal-Bejo; se desarrolla un relato donde el Sci-Fi y el romance se mezclan.
Aunque quizás la película se extiende un poco y es algo reiterativa y vaga en su segunda mitad, consigue algunas imágenes evocadoras (como la de los recuerdos donados para exhibirse en una galería), las cuales recuerdan un poco a las inquietudes presentes en los primeros trabajos de Atom Egoyan, y su trama plantea algunas interrogantes interesantes acerca de las afinidades afectivas y la complejidad de los sentimientos humanos; los nada fáciles procesos del duelo; y el poder resignarse a la pérdida y decir adiós.
Dirección: Piero Messina
Guión: Piero Messina, Giacomo Bendotti, Valentina Gaddi y Sebastiano Melloni
Con: Gael García Bernal, Renate Reinsve, Bérénice Bejo, Olivia Williams, Anne Kidd
Fotografía: Fabrizio La Palombara
Edición: Paola Freddi
Música: Bruno Falanga
Compañía Productora: Indigo Film y Rai Cinema, en asociación con TF1, Anton y Number 9 Films
Distribuidor: Dark Side Distribution
Fecha de estreno: Alemania, 17 de febrero de 2024 (Festival Internacional de Cine de Berlín); México, 11 de diciembre de 2025
País: Italia-Francia-Reino Unido, 2024.
Duración: 119 minutos