La ciudad de México esconde cientos de historias que aún cuando pasan a la vista de todos, nadie ve, nadie habla de ello, secretos a voces que son preferibles ignorar a mirar y tener que reconocer el horror que transcurre ante nuestras miradas, pocas veces el cine busca retratarles de una forma directa, honesta, como es el caso de “Marioneta” que nos lleva al mundo de las mafias que controlan a los pedigüeños en las calles o el metro.
Ernesto llega de Cuba para participar en una obra de teatro, pero es rechazado en favor de otro intérprete. En el metro de la ciudad de México conoce a Belén, quien finge discapacidades en el metro para obtener monedas, lo que le lleva a inmiscuirse con una de las agrupaciones que controlan esas actividades, y volverse su guía en el arte de engañar de forma creíble.
En 2010 Álvaro Curiel nos presentó su primer largometraje, “Acorazado” donde tocaba el tema de la inmigración y del engaño como una forma de sobrevivencia. Ahora en su segundo largometraje toca de nuevo esas cuestiones, mostrando si bien no ahora una migración ilegal si las situaciones que arrojan a la gente a entrar a la clandestinidad. En ese sentido “Marioneta” alcanza sus mejores puntos, al llevarnos a un oscuro pasaje de la ciudad donde la manipulación, el asco, el desprecio dominan. Es bastante claro ese momento donde uno de los personajes dice que todos saben que fingen sus discapacidades, pero que aún así les dan dinero porque así acallan su vergüenza al ver a los otros.
La cinta es protagonizada por Rafael Ernesto Hernández como el cubano que encuentra en los falsos discapacitados la audiencia que sueña para sus fantasías de fama, como el ser que controla al grupo tenemos a Juan Manuel Bernal, pero quienes en realidad se roban cada momento en pantalla son Fátima Molina, la “Marioneta” del título, amante de Torrico, enamorada del cubano, entre el deseo de abandonar todo y el no poder dejar nada por cuestiones personales, y, sobre todo, Nicolasa Ortíz Monasterio, quien poco a poco comienza a ganar presencia en pantalla y, en esta ocasión, nos enamora con su interpretación, haciéndonos soñar cada vez la vemos.
La cinta hace un duro cuestionamiento sobre las mafias que controlan la ciudad y la forma en que estas explotan a aquellos que caen en sus redes, de la forma en que para muchos es más practico entrar al mundo de los miserables ante la falta de oportunidades y de desarrollar sus sueños. Sobre como el poder siempre corrompe y de la forma en que tenerlo hace que los demás sean marionetas de aquellos lo ejercen.
Desafortunadamente la historia se alarga demasiado, pierde demasiado tiempo en las clases da el actor a los que piden limosna -curiosamente, de lo mejor de la película- pero que termina siendo un elemento que nada aporta a la trama. Si bien todo esa parte es llamativa y con momentos increíbles, aletarga los hechos. Así como diversas cosas que en lugar de atrapar solo hacen uno este mirando el reloj esperando acabe.
“Marioneta” es una cinta interesante, fallida, sobre cuestiones que ocurren en la ciudad de México y donde los protagonistas no son sólo los intérpretes sino las calles, los hoteles, el metro, todo lo que vemos día a día. Con cautela solamente al ir a verla.
Los invitamos a ver el tráiler.
“Marioneta”
Director: Álvaro Curiel
Guión: Arturo Arango / Álvaro Curiel
Con: Juan Manuel Bernal, Fátima Molina, Rafael Ernesto Hernández, Patricia Reyes Spíndola, Nicolasa Ortíz Monasterio, Damayanti Quintanar
Fecha de estreno: 17 enero 2020
País: México 2019
Duración: 109 minutos
