Críticas
El Lenguaje de los Machetes, un incompleto que duele
Raymundo (Andrés Almeida) y Ramona (Jessy Bulbo) forman una pareja como cualquier otra, el graba algunos eventos y ella se dedica a su banda de punk. Ella es una mujer comprometida no sólo con su música sino con sus ideales políticos y con su familia. Cuando ella le comunica su deseo de ser madre, él entra en una crisis que le lleva a buscar formas de demostrarle a ella que es capaz de comprometerse con algo. El resultado es inevitable.
Una de las películas mexicanas más esperadas del año El Lenguaje de los Machetes por fin llega a la Ciudad de México en el marco del Segundo FICUNAM, después de recorrer diversos festivales como el Venecia, San Sebastian y el de Morelia, donde fue recibida con curiosidad por la crítica especializada. Una película controversial, no sólo por sus temas sino por su estilo, por sus propuestas.
Contrabando, acción, adrenalina, bromas nada más
Cuando la aduana norteamericana toma el barco, un joven debe deshacerse de la droga que intentaba meter de contrabando a Estados Unidos. Esa acción provoca que los encargados de recibirla le den un plazo de dos semanas para pagar el cargamento o ser asesinado. Como la deuda se hereda a la familia su cuñado, un mítico contrabandista, decide ayudarle. En el camino descubrirá algunas mentiras que podrían terminar con todo lo que busca preservar.
Acción. No hay más. Una simple y entretenida película de acción. Y bien hecha. Muchas veces se agradece lleguen películas cuya única pretención sea meter dinero a la taquilla y lograr que el espectador se pierda un rato entre persecuciones, escapes milagrosos y finales felices donde el héroe es recompensado y los villanos castigados. Contrabando es una de ellas.
El Artista, un pretencioso ejercicio de estilo
Un consagrado actor de cine mudo conoce de manera fortuita a una joven aspirante a actriz, la ayuda a ingresar al medio y al poco tiempo la ve encumbrarse en los talkies mientras su carrera se va al olvido. Sólo el amor de ella lo podrá salvar de la destrucción.
El Artista (The Artist) de Michel Hazanavicius pretende ser una cinta que rinde el gran homenaje al cine mudo al utilizar las técnicas desarrolladas durante esa etapa del lenguaje cinematográfico: no diálogos y si intertítulos; uso de pantalla cuadrada; actuaciones remarcadas con mucho juego de mímica; fotografía en blanco y negro, etc. Pretende y no lo es. En el fondo es un ejercicio de estilo como el que le dejan a los estudiantes en las escuelas de cine, con la diferencia de presupuesto y del equipo de relaciones públicas que han sabido vender la cinta en todo el mundo como “el gran homenaje al cine”.
Ni hojalatero, ni soldado, ni sastre… sólo un espía
Los descendientes, la complejidad humana sin melodrama
Accidentes pasan en los momentos menos imaginados y cuando la persona a la que amas sufre un terrible accidente y está cerca de morir, la vida gira alrededor de una última esperanza “despierta y prometo cambiar”. Para Matt King, un esposo y padre distante, es lo único que lo mantiene adelante después de que su esposa, Elizabeth King, queda en coma y no hay muchas esperanzas de que salga de ese estado. Sin embargo, la vida nunca es lo que uno espera y cuando se cree que las cosas no pueden empeorar es cuando uno se da cuenta: siempre se puede estar peor.