Los descendientes, la complejidad humana sin melodrama

Los-descendientesAccidentes pasan en los momentos menos imaginados y cuando la persona a la que amas sufre un terrible accidente y está cerca de morir, la vida gira alrededor de una última esperanza “despierta y prometo cambiar”. Para Matt King, un esposo y padre distante, es lo único que lo mantiene adelante después de que su esposa, Elizabeth King, queda en coma y no hay muchas esperanzas de que salga de ese estado. Sin embargo, la vida nunca es lo que uno espera y cuando se cree que las cosas no pueden empeorar es cuando uno se da cuenta: siempre se puede estar peor.

George Clooney toma el papel de Matt King, un abogado en Hawaii que se ha enfocado en trabajar y cuidar de la fortuna de su familia pero completamente alejado del cuidado de sus dos hijas y la relación sentimental con su esposa. Su entorno familiar se ve destrozado cuando se da cuenta que es un completo extraño en la vida de sus hijas y se enfrenta al tener que entender, educar y lidiar con una adolescente con problemas de alcoholismo y una niña de diez años que a través de su imaginación e insolencia trata de lidiar con el hecho de que su madre está en el hospital.

Sin caer en el melodrama barato, los personajes exponen sus sentimientos de manera honesta, sin pretensiones, con un toque de humor y llegan a darse cuenta que después de enfrentar los momentos más duros sólo queda dar un respiro y saber que ante todo sólo queda seguir adelante.

La actuación de Clooney deja sin palabras, Matt King es un personaje que podría caer en lo exagerado y absurdo, sin embargo Clooney logra demostrar por qué es un gran actor y da una de las mejores interpretaciones de su carrera.

Con una fotografía impresionante, Alexander Payne explota la belleza de Hawaii y logra conseguir interpretaciones maravillosas del resto del reparto. Las dos hijas de King, interpretadas por Shailene Woodley y Amara Miller, se alejan de la visión idealizada de que no siempre se está dispuesto a ayudar, como seres humanos tienen que lidiar con sus propios sentimientos y lograr al final poder seguir adelante.

Los descendientes logra llevar al espectador a momentos difíciles pero que muestran como el ser humano es todo pero sencillo.



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