Habemus Papam se adentra al Vaticano en una historia en la que sin miedos ni exageraciones presenta a cardenales y al mismo Papa como seres humanos, entre momentos serios que se vuelven divertidos y una análisis de la vida, logros y deseos aún no realizados, el film inicia ante la situación menos pensada, el deseo de los cardenales de no querer ser el siguiente Papa.
Ante la presión inmediata de ser nombrado el líder de la iglesia católica, el cardenal Gregori sufre un ataque de crisis justo antes de hacer su primera aparición frente a la multitud de fieles que lo esperan. Enfrentados a un suceso inaudito, los cardenales buscan la manera de convencer al recién elegido Papa de presentarse ante sus súbditos. Después de acceder a traer a un psiconalista al Vaticano y no tener resultados positivos, éste termina encerrado con los cardenales en espera de que el Papa se mejore, mientras nadie sabe que el Papa se ha escapado de la guardia privada.
Michel Piccoli da vida al Papa Gregori logrando una actuación estúpenda en un papel díficil, siendo su personaje una figura sumamente importante y en este caso en una situación que puede disgustar a más de uno al presentar al Papa como un simple ser humano, con sueños frustrados, anhelos y dudas.
El psicoanlista es interpretado por el director de la película, Nanni Moretti, quien después de tan sólo una visita con el Papa, observada por todos los cardenales, es obligado a quedarse en el Vaticano hasta que el Papa se presente públicamente. En el tiempo que está encerrado con los cardenales tenemos tiempo de ver que aquellos hombres que parecen figuras tan distantes son seres con pesadillas y una que otra adicción a medicamentos que no deberían estar tomando o combinando.
Se suma a ellos un personaje secundario pero fundamental para la trama, Jerzy Stuhr quien interpreta el portavoce del Vaticano y es el principal en llevar a cabo la farsa de esconder que el Papa se ha escapado y se dedica a inventar toda serie de desvaríos para evitar que los cardenales entren en pánico, hasta que llega el momento inevitable de hacerles saber la verdad.
La película intercala la vida dentro del Vaticano entre los cardenales y Moretti quien busca la manera de entretenerlos y tal vez encontrar la manera de acabar con su retiro forzoso mientras seguimos el camino de Gregori y su búsqueda de saber quién fue y quién en verdad quiere ser.
Moretti logra en su mayoría un film divertido sin llegar a la burla ni de las creencias religiosas ni de aquellos que las siguen ya que no es su punto principal el de inferiorizar sino el de mostrar que bajo sotanas o creencias al final todos somos humanos. Aunque la película inicia con gran fuerza no siempre se mantiene el ritmo y en momentos se vuelve un poco lenta y repetitiva sin embargo la actuación de Piccoli se mantiene a lo largo del film, además de que se le permite al espectador reflexionar el final de la película al no dar un final específico.
Los invitamos a ver el tráiler aquí.
