El Premio, creciendo en la dictadura

el premioEl Premio de Paula Markovitch es un doloroso relato de la dictadura militar en argentina vista a través de los ojos de una niña de 7 años, quien sin comprender lo que pasa a su entorno no deja de reaccionar ante el mismo. Ganadora del Oso de Plata en el Festival de Cine de Berlin, y como mejor película en el Festival Internacional de cine en Guadalajara y de Morelia, la cinta por fin podrá ser vista por el público mexicano en salas comerciales.

Paula Markovich realiza una cinta semi autobiográfica que de una forma devastadora captura el terror y el dolor de lo que fue una de las dictaduras más sanguinarias del continente americano, y además lo hace con una economía de recursos que sorprende y que permite al espectador involucrarse con la historia.

El Premio narra la historia de Cecilia quien tiene siete años y quien vive con su madre en una cabaña a la orilla del mar en San Clemente del Tuyú, donde se refugian en espera de la llegada del padre que busca sobrevivir a la dictadura argentina. Cecilia debe ocultar toda información que pueda revelar que son perseguidos políticos. Y un día los militares llegan a la escuela para promover un concurso que podría cambiar la vida de la niña y su madre.

La película logra mantener todo el tiempo la mirada inocente de una niña ante las atrocidades que ocurren a su alrededor y su entorno funciona como una gran metáfora de lo que está viviendo. Su casa llena de muebles viejos y sufre las inclemencias del clima, se inunda con las lluvias, es asfixiante. Pero es su escuela la que se convierte en un microcosmos de la Argentina de los 70s, gris, adoctrinante, que impulsa la delación y separa a todos.

Protagonizada por Paula Galinelli Hertzog, quien comparte en la vida real el nombre de la directora y en la ficción el apellido Edelstein, se nos descubre como una gran intérprete a pesar de su corta edad y logra transmitir la confusión en la que se desenvuelve.

El Premio es dolorosa, no tiene concesiones con el espectador como no las tiene con la protagonista, su inocencia se ve fragmentada ante el entorno, intentando comprender lo que le piden en casa sin poder entender la magnitud de la situación vive su país. Una de las mejores visiones sobre la dictadura militar sin mencionarle por su nombre, ubicarle en años o presentar las brutales muertes que la caracterizaron.

La cinta ganó el Oso de Plata en el Festival de Berlín del 2011, donde exhibió en una versión con un final distinto al que llega a cines, con un ritmo diferente. La versión se ve en pantallas mexicanas, si bien no es esa versión es excelente.

Los invitamos a ver el tráiler.


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