Volando Bajo, la nueva cinta de Beto Gómez, es un viaje al pasado, es un homenaje al cine fronterizo de los ochentas, a la música popular de baile de finales de los setentas, es un atinado film que puede llegar al corazón de todos aquellos que crecieron en esos años, con un estilo que sin duda recuerda esa época, que llena de nostalgia, risas y gratos momentos lo que transcurre en pantalla.
En la época actual, en Francia, una reportera entrevista a Chuyin Venegas, quien junto a Cornelio Barraza formara el exitoso dueto Los Jilgueros de Rosarito. Esa entrevista sirve para llevarnos de viaje por el tiempo para conocer la historia entre estos dos hombres, desde que se conocen siendo niños hasta el rompimiento del dueto.
Beto Gómez es el director de cintas como Puños Rosas (20049 y Salvando al Soldado Pérez (2011) y en esta ocasión de nueva cuenta vuelve a dar en el clavo al realizar una película que no busca ser una burla de un estilo musical mexicano ni de una forma de realizar cine, sino que le rinde un homenaje paródico que eleva lo visto, alejándole sólo del terreno del kistch.
Uno de los puntos fuertes de la película es sin duda el elenco que tiene, encabezado por Gerardo Taracena y Rodrigo Oviedo quienes dan vida a Chuyin y Cornelio respectivamente, como la prima del primero y gran fan del grupo esta Ludwika Paleta quien por fin nos da un papel que logra explotar en pantalla grande. También sale Sandra Echeverría quien de nueva cuenta cae en su burda imitación de look de Salma Hayek sin aportar nada.
De los actores que aparecen dando vida a personas importantes en la vida de los músicos esta Xavier López quien da vida a un productor de cine, de esas películas polvosas que podríamos ver antes por canal 09, casi videohomes. Es de aplaudir su comentario de que con el fin del dueto se había acabado el boom del cine popular mexicano, que hasta se había visto obligado a hacer una película de esas de arte donde un hombre camina ante la cámara por horas, en franca referencia al cine contemplativo que aleja por completo al espectador promedio de las salas de cine. Roberto Palazuelos también da vida a un divertido personaje, así como Rafael Inclán quien rinde con su personaje un gran homenaje a Butch Cassidy & The Sundance Kid (Hill 1969).
Un elemento clave es la música, sin duda regresamos a la época de Los Pasteles Verdes, de los Yonics, de los Bukis, esas canciones melosas derrama-miel-com-por-diabetes, al igual que pasará con el éxito de Gaél García Bernal de Rudo y Cursi (Cuarón 2008), la infame “Quiero Que Me Quieras”, las canciones de la cinta, aunque paródicas, respetan tanto el estilo de ese tipo de canciones que podrían sonar en radio y convertirse en un éxito.
La fotografía es el otro gran acierto, de tonos saturados por momentos, deslavada en otros, de una gran definición por momentos. Cada etapa está marcada por su particular estilo de fotografía de cine mexicano. Un placer para todos aquellos que conocen esos estilos que predominaron en nuestra cinematografía. La edición corre a cargo de Viviana García-Besné quien dirigiera esa joya documental de Perdida.
Volando Bajo es una comedia inteligente pero no repelente, no busca ponerse sobre el espectador sino se pone de su lado. Si son de las personas que añoran esas películas y música sin duda disfrutarán de forma intensa esa cinta. Muy divertida.
Los invitamos a ver una colección de videos de Los Jilgueros de Rosarito, así como el tráiler de la película.
Volando Bajo
Director: Beto Gómez
Con: Gerardo Taracena, Rodrigo Oviedo, Ludwika Paleta, Sandra Echeverría
Música: Pascual Reyes
Distribuidor: Latam Pictures
Fecha de estreno: 19 junio 2014
País: México
Duración: 90 minutos