Hubo una época que hablar de una cinta de Pedro Almodóvar era toda una sensación, no se sabía para donde se dirigiría pero se esperaba una película donde los personajes femeninos fueran fuertes, donde la historia sería subversiva pero íntima, capaz de llevar al espectador al cielo y al infierno, de la risa a la desesperanza absoluta. De pronto ese cine comenzó a cambiar, a volverse más complaciente, a dejar su tono para volverse moralino, para volverse amigo del espectador en lugar de ser fiel a lo que se contaba, así que no extraña que Julieta siga el mismo camino, quizá mejor que Los Amantes Pasajeros pero lejos de sus obras medianas y ya no digamos de sus mejores trabajos.
Julieta está a punto de viajar a Portugal con su pareja cuando un encuentro inesperado en la calle le hace cancelar todo y encerrarse en sí misma, obligándole a realizar un recuento de su vida y a las circunstancias le llevaron a descubrir que su hija le había abandonado sin explicación hace doce años.
Julieta sin duda tiene uno de los mejores momentos de Pedro Almodovar en un tiempo, un extraño coqueteo en pleno funeral que recuerda la forma el director manchego se conducía hace muchos años cuando le interesaba contar historias y no hacer cine para ser premiado e festivales, para sus incondicionales solamente. De ahí en fuera todo es un fallido intento de mostrar un drama como un thriller, usando clichés, una muy mala dirección de actores y con una espantosa narración en off.
Los fans del director sin duda rescatarán todo lo que no se puede rescatar de esta cinta, que sigue marcando la decadencia del que fuera un gran director y que ahora parece empeñado en demostrar ya no lo es. Y no es sólo por las historias maneja, sino por el mismo uso hace de la cámara, por ejemplo, en la secuencia del tren donde el eje visual narrativo es roto todo el tiempo sin sentido, distrayendo la atención del espectador, o que decir de sus actores entran a cuadro recitan el diálogo y salen de forma televisiva.
Emma Suárez y Adriana Ugarte, quienes dan vida a Julieta en tres etapas de su vida, carecen del encanto de las chicas Almodovar, no tienen su fuerza, parecen muy forzadas e incapaces de enfrentar y salir adelante por su cuenta y aun así soportan la cinta en sus hombros. Son mucho más fuertes los personajes que les rodean a pesar de lo pequeño de sus papeles, como Rossy de Palma o Mariam Bachir. Los personajes masculinos son desdibujados y en alguna forma intrascendentes, necesarios sólo para hacer avanzar algún punto de la historia.
Y de nueva cuenta el director parece empeñado en tener finales esperanzadores de sus cintas en lugar de destrozar con una dura realidad a sus personajes, haciendo que se sienta poco natural, poco creíble. Pero en el fondo no importa, su cine carece ya de la fuerza tuvo y parece solo un intento de copiar lo que antes le funcionaba pero orientado a un público más amplio y menos complaciente.
Julieta es una cinta que habla de las forma se afrontan las perdidas, de cómo seguir adelante hasta que algo te hace caer de nuevo en una espiral de destrucción, de cómo huir del pasado sólo sirve para ser golpeado por él en el presente. Interesante para sus seguidores, pero con muy poco que ofrecer para los demás. Bajo su riesgo.
Los invitamos a ver el tráiler.
Julieta
Julieta está a punto de viajar a Portugal con su pareja cuando un encuentro inesperado en la calle le hace cancelar todo y encerrarse en sí misma, obligándole a realizar un recuento de su vida y a las circunstancias le llevaron a descubrir que su hija le había abandonado sin explicación hace doce años.
Director: Pedro Almodóvar
Guión: Pedro Almodóvar
Con: Emma Suárez, Adriana Ugarte
Distribuidor: Universal Pictures
Fecha de estreno: 08 abril 2016 (España) 08 julio 2016 (México)
País: España 2016
Duración: 96 minutos