Tempestad o La Terrible Realidad

Tempestad huezoSon dos las voces femeninas que nos cuentan en el documental Tempestad, un par de historias sobre injusticia y corrupción en México, que cada vez se escuchan más frecuentemente en los medios de nuestro país: una joven que trabajaba en la aduana al norte de nuestro país es acusada injustamente de formar parte de una red de trata de personas y, crucificada incluso ante los medios con gran faramalla, terminan en una cárcel autogobernada por un cartel del narcotráfico, donde es despojada de toda esperanza al ser extorsionada para no ser asesinada como lo es todo aquel que no cumple las reglas del lugar.

Por otra parte, una mujer madura que ha dedicado toda su vida al circo carretero -labor inculcada por sus padres- se enfrenta a la desaparición de su hija adolescente, y después de años de haber sufrido la incapacidad de las autoridades para encontrarlas, empieza a hacer averiguaciones que la hacen sospechar de las mismas autoridades y que le indican que su hija puede estar viva, justo en una red de trata.

Tempestad es el segundo documental en largometraje de la estupenda realizadora Tatiana Huezo, egresada del Centro de Capacitación Cinematográfica (directora del largometraje El lugar más pequeño, y el cortometraje sobre Ayotizinapa, Ausencia), una voz que después de su primer documental harto premiado en todo el mundo, se ha convertido en una voz indispensable, no sólo de nuestra cinematografía, sino incluso de la moral de nuestro país: no sólo es siempre impecable la serie de imágenes que escoge para relatar de manera aparentemente indirecta las historias que encuentra y que, claramente, le trastornan, sino que su unión audiovisual logra siempre su objetivo de estrujarnos y despertarnos.

Huezo no ilustra las historias que narran con las imágenes que corresponderían a un registro visual del caso. Prefiere narrar lo interior, la mirada que se pierde hacia dentro, o que vaga al exterior sin posible intención alguna. Hay siempre una gran belleza, pero no se busca la poesía en el dolor: esta aparece, elusiva, para iluminarlo -lastimándonos sin querer.

Con el tema del filme Tempestad, no hay modo de evitar el sentirse apabullado, deprimido, enojado y alerta tras verla. Pareciera que el paisaje verde y húmedo de nuestro país, revisitado y reinterpretado por la estupenda cámara de Ernesto Pardo, ha sido bañado por las lágrimas de dolor e impotencia de nuestras protagónicas. Igual las carreteras ya no comunican sino que se convierten en páramos interrogantes, los camiones transportan miradas adoloridas y expectantes, los circos se llenan de payasos irónicos y tristísimos, el amor filial y femenino se convierte en una red de apoyo.

Tempestad fue uno de los filmes ganadores en el paso Festival de Cine de Morelia y se encuentra actualmente exhibiéndose en el circuito de la Muestra Internacional de Cine de la Cineteca Nacional. Los invitamos a leer otra perspectiva de este documental.


Imprimir   Correo electrónico