En el 2000 M. Night Shyamalan nos sorprendió a todos cuando hizo “El Protegido” (Unbreakable) una cinta de superhéroes que brindaba un agradable homenaje a todos los fanáticos de los comics, una película cuyo estilo visual de inmediato nos recordaba leer esas historietas, una aventura donde el protagonista y villano eran más reales que lo habitual. En el 2016 se estrenó “Fragmentado” (Split) la cual narraba la historia de un asesino en serie que posee múltiple personalidad, siendo la más cruel una llamada “La Bestia”, pero lo que realmente impactaba de ello era su final, cuando nos enterábamos que acabábamos de ver la secuela de la cinta del 2000. Ahora nos llega “Glass”, la cual brinda el cierre a lo que ahora conocemos como la Trilogía del Eastrail #177.
Han pasado 15 meses desde que “La Bestia” logró escapar y quien continúa su misión de eliminar a los impuros del mundo, ahora es perseguido por David Dunn quien logra ubicar su guarida y enfrentarle, durante el combate ambos son detenidos y enviados a un hospital psiquiátrico, donde se encuentra confinado Elijah Price, autor del ataque terrorista que descarrilo el Estrail #177. El encuentro entre los tres definirá el destino de la humanidad.
Shyamalan es un director de altibajos, sus trabajos no siempre tienen la misma fuerza o la misma sorpresa, pero es innegable que tiene un estilo propio, que tiene claras sus intenciones y que, si bien no logra llevarles siempre a buen puerto, si podemos encontrar su sello, el cual se destaca principalmente por sus giros de tuerca al final, los cuales va planteando toda la cinta sólo para hacerlos claros en el momento preciso y, ahora con “Glass” no es la excepción, la película no es perfecta pero si es el cierre perfecto a su trilogía de superhéroes. Y todo sin abandonar su ritmo pausado, sin precipitarse, sin desbordarse.
La cinta es protagonizada por Bruce Willis, Samuel L. Jackson y James McAvoy, quienes repasan sus personajes de los títulos anteriores, retornando también Anya Taylor-Joy, la sobreviviente de “Fragmentado”, Charlayne Woodard (la madre de Elijah) y Spencer Treat Clark (el hijo de Dunn), agregándose Sarah Paulson, todos dueños de una gran fuerza en pantalla y que dotan de vida y credibilidad lo que hacen.
“Glass” llega a México con la sombra de comentarios negativos que la crítica norteamericana ha vertido sobre ella, destrozándole, lo cual nos muestra la decadencia en que se encuentra las otroras prestigiosas plumas de ese país, basta recordar que son los mismos han alabado al cansancio “El Regreso de Mary Poppins” (Mary Poppins Returns) y que han atacado otras películas que nos han resultado entretenidas y con diversas lecturas, y, ahora, con esta cinta siguen esa línea, la nueva película de Shyamalan es una cinta arriba del promedio, que lleva al espectador por caminos distintos a lo que nos tienen habituados ya las cintas de Marvel y DC, recordándonos el camino del superhéroe como lo plantean los comics y no cómo lo quieren hacer ver los guionistas de Hollywood. “Glass” es una cinta hecha para los verdaderos fans del comic y no para los que ahora creen saberlo todo por ver las películas que se han hecho de los mismos.
M. Night Shyamalan decide con su trilogía dar una bofetada a la espectacularidad de las cintas de superhéroes, donde ahora es más importante el efecto visual y especial, regresando a la esencia de los comics, a los villanos que manipulan todo con un plan maestro que ocultan a la vista de todos, con héroes se sacrifican por el bien de la humanidad, con giros típicos de los arcos de todo comic. Y que la cinta la haga dentro de la casa de Marvel, hace que la bofetada sea aún más sonora. Un excelente cierre para su trilogía, que, si bien defraudará a los aficionados del cine de superhéroes, encantará a los lectores de sus historietas.
“Glass”
Director: M. Night Shyamalan
Guión: M. Night Shyamalan
Con: Bruce Willis, Samuel L. Jackson, James McAvoy, Anya Taylor-Joy, Charlayne Woodard, Spencer Treat Clark, Sarah Paulson
Distribuidor: Walt Disney Studios Motion Pictures
Fecha de estreno: 18 enero 2019
País: Estados Unidos 2019
Duración: 129 minutos
