Este 17 de diciembre, el público podrá conocer los cinco proyectos ganadores de la convocatoria “Huellas verdes: Concurso de creación de cortometrajes con mejores prácticas para reducir su impacto ambiental”, abierta por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC), en el marco del proyecto Chapultepec, Naturaleza y Cultura.
La convocatoria, que invitó a creadoras y creadores cinematográficos del país a registrar sus guiones de cortometrajes de ficción, basados en los conceptos de naturaleza y cultura, cierra su proceso luego de ocho meses y tres etapas de desarrollo, con el estreno de los proyectos seleccionados, que recibieron un estímulo por un monto de hasta $400,000.00 (cuatrocientos mil pesos 00/100 M.N.), para su realización; fueron elegidos tomando en cuenta los méritos cinematográficos, estrategia ambiental y factibilidad de su producción.
Al estreno está invitado el público en general, la cita es el viernes 17 de diciembre a las 17 horas, en la Casa Miguel Alemán del Complejo Cultural Los Pinos, donde se seguirán todos los protocolos para el cuidado de la salud, entre los que se encuentran el uso de cubrebocas, aplicación de gel antibacterial.
Se invita a las y los asistentes a llevar un juguete (que no use baterías), nuevo o en buen estado, mismo que será donado a niñas y niños de Guerrero, como parte de las acciones de “Navidad en las montañas”, parte de las acciones con las que la Secretaría de Cultura del Gobierno de México participa en el Plan de Apoyo a Guerrero, presentado por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en octubre pasado.
Los cortometrajes que se podrán apreciar son los siguientes:
“Polvo de montaña”. Dirigido por Ana Marlén Ríos Farjat. Filmado en Monterrey, Nuevo León. Es la historia de Jessy, una joven empleada doméstica, quien, en medio de la explotación minera, encuentra la fuerza para enfrentarse al poder político que está destruyendo la salud de su familia. El equipo de rodaje, integrado por 54 personas, fue local, a excepción del Director de Fotografía, y el 50% fue integrado por mujeres. Todas las locaciones fueron seleccionadas con criterio de aprovechamiento de la luz natural para minimizar el impacto ambiental (uso mínimo de energía eléctrica).
“Escopeta”. Dirigido por Daniel Aarón Hernández Villarreal. Filmado en La Noria y Santa María del Oro, Nayarit. Carlos es un niño que llega a un nuevo pueblo e intenta impresionar a los niños locales, para lo que roba la vieja escopeta de su abuelo y pronto se ve en la disyuntiva de si vale la pena matar a un animal de la fauna local solo para ser aceptado. El equipo del rodaje, de 26 personas, todas ellas residentes de Nayarit. Siguiendo los protocolos para reducir el impacto ambiental, la escopeta utilizada fue creada totalmente por el departamento de arte, con materiales reciclados, así como los cartuchos usados.
“Tlaconete”. Dirigido por Oriana Jiménez Castro. Filmado en Xalapa, Veracruz. Eme, una niña de 13 años, cree que los tlaconetes se meten en el cuerpo de las mujeres para embarazarlas y al viajar con su madre a las aguas termales, se pondrá en contacto con su propia dimensión animal para resignificar su cuerpo femenino. El equipo de rodaje, de 20 personas, originarias de Xalapa y de Ciudad de México. Durante el rodaje, que incluyó como locación un balneario, se pudo ver una gran cantidad de animales, incluyendo un tlaconete.
“Driver Kids”. Dirigido por Juan Carlos González Rodríguez. Filmado en Axaxacualco, Guerrero. Esta es la historia de dos niños, en medio de la montaña guerrerense, que viven la experiencia de ser Driver Kids, conductores de mototaxis que comenzaron a proliferar a raíz de la COVID-19. El equipo del rodaje, compuesto de 35 personas, la mayoría guerrerense, siendo casi la totalidad de los intérpretes de la localidad de Axaxacualco, comunidad de origen náhuatl, que recientemente ha recuperado su reconocimiento como pueblo originario.
“Hora petrolera”. Dirigido por Emilio Braojos Fuertes. Filmado en Minatitlán y Coatzacoalcos, Veracruz. Es la historia de un conductor de taxi en Minatitlán, Veracruz, a quien se le acompañaa lo largo del día, observando los conflictos de una ciudad azotada por la violencia y la contaminación. Se puede ver el contraste con pequeños momentos de belleza y poesía del paisaje natural. El equipo de rodaje, integrado por 42 personas, fue en su mayoría de gente de Xalapa, mientras que los intérpretes son principalmente de Minatitlán y Coatzacoalcos. Destaca que, Cuando se lanzó el casting para dichas ciudades se tuvo respuesta de más de 200 personas interesadas en participar.
