El cuarto día de la MUNACIFRE tuvo un cierre inesperado y muy emotivo al término de la última película dentro del homenaje al gran actor Silverio Palacios. También se presentó el programa de cortometrajes zacatecanos, el documental La revolución de los alcatraces y la inauguración de la exposición de Carteles de Cine Mexicano.
Los cortometrajes zacatecanos se presentaron en el tradicional teatro 1° de mayo en donde se tuvo la oportunidad de platicar con algunos de los creadores. Seguido de esto, se proyectó el documental La revolución de los alcatraces en donde estuvo presente su directora, Luciana Kaplan. Los presentes entablaron un diálogo con la directora sobre el tema que presenta en el documental y cómo es que fue evolucionando la situación en el pueblo de Eufrosina Cruz (la protagonista); añadió que, a pesar de que Eufrosina no ganó las elecciones, un compañero del mismo partido quedó como representante y se ha visto un favorable cambio en la comunidad.
La MUNACIFRE tuvo como invitado especial al actor Silverio Palacios; Palacios fue elegido para ser el homenajeado en esta quinta edición. Como parte de las actividades se programaron proyecciones diarias al aire libre en la que se presentaron diversos filmes en los que aparece Palacios. Las películas que se proyectaron fueron Cero y van cuatro (Carrera, 2004), Conozcan la cabeza de Juan Pérez (Portes, 2009) y Acorazado (Curiel, 2010). En todas las funciones, Palacios estuvo presente para responder las dudas del público, siempre feliz y muy amable con cualquiera que quisiera una foto a su lado o un autógrafo.
Por segunda ocasión se presentó la exposición de Carteles de Cine Mexicano, a pesar de ser de sólo 100 carteles, la exposición fue muy bien recibida e indudablemente es un manjar visual el poder apreciar esas piezas históricas que fueron rescatadas gracias al escultor José Pérez; de otra manera podrían haberse perdido hace mucho tiempo. El dueño de los carteles tiene más de 2000 carteles en su posesión y sólo se mostraron 100 debido a que el lugar, el Extemplo de la Concepción, es muy reducido. Gracias al trabajo en conjunto con la Cineteca de Zacatecas y el trabajo de su directora, Gaby Marcial, es posible que esta quinta edición de la MUNACIFRE se pueden admirar estos carteles que permiten recordar grandes cintas del cine mexicano.
A continuación les transcribimos el discurso que escribió Alejandro Ramírez para la inauguración de esta exposición.
Así como el cine ha llenado las pantallas por más de un siglo, los carteles se acumularon como acuse de recibo en las bodegas de un viejo cine en desuso, el cine se encuentra en Jalisco, el héroe es un escultor, se llama José Pérez, un apasionado del arte quien rescató del abandono a más de 8,000 carteles. El cine cerró, las películas ya no se exhiben en su pantalla, los carteles ahora viven aquí, en las paredes del Ex templo de la Concepción.
Esta exposición contiene 100 carteles del amplio archivo que conforma la colección que hoy se encuentra en resguardo de la Cineteca de Zacatecas, la curaduría es de Gabriela Marcial Reyes, quien a través de su mirada ha creado más que un ejemplo de la cinematografía nacional, un pretexto para viajar a los recuerdos y junto a nuestros visitantes comprobar que el cine y nuestra vida siempre han contado una historia juntos.
MUNACIFRE se complace en ser anfitrión de esta exposición que celebra al diseño, la gráfica y el cine, su montaje ha sido posible gracias a la colaboración del Instituto Municipal de Arte y Cultura de Puebla, Cineteca de Zacatecas y NOVEL Foro Mexicano para el Cine Nuevo.
Al finalizar la proyección de Acorazado; la última película dentro del homenaje para el actor, Silverio Palacios se tomó el tiempo para hacer un llamado inesperado y que fue recibido con emoción y una ola de aplausos. Palacios llamó a todos los amantes del cine (cineastas, productores y público en general) en Fresnillo a unirse y hacer un corto o largometraje con gente de la ciudad, Palacios dijo que él se comprometía ayudarlos y hacer posible el proyecto. Emocionado y muy contento, Palacios cerró su homenaje con un gran llamado para hacer más cine en Fresnillo, todo gracias al recibimiento caluroso y respetuoso que tuvo por parte de la gente del lugar.
El día cerró con la tradicional callejoneada en la que se bebió mezcal, se bailó a son de música de banda en vivo hasta ya entrada la noche.
