Hace 16 años, Hayao Miyasaki presentó La Princesa Mononoke (1997), película animada que retrata la batalla entre los dioses que protegen la naturaleza, la explotación de los recursos naturales a manos de los humanos para así poder crear una industria próspera, una visión feminista y a la vez una crítica social.
Capitán Colter, un piloto del ejercito, se despierta en un tren camino a Chicago sin tener idea de dónde está o quién es la mujer que lo acompaña. Pronto descubre que él no es él sino un hombre llamado Sean Fentress, los minutos pasan y no encuentra más que preguntas sobre el porqué de todo lo que está pasando hasta que el tren explota y al recuperar la conciencia se encuentra en un nave pequeña con el único contacto al exterior a través de una pantalla y una mujer llamada Goodwin quien le da instrucciones sobre su misión, de la que no tiene memoría alguna.