David Schwimmer, el hermano de Monica en la serie Friends, Ross el paleontólogo, la voz de la jirafa de Madagascar, el actor que la mayoría olvidamos de inmediato, nos sorprende con su segundo largometraje, La Perdida de la Inocencia (Trust) donde se revela como un director inteligente y capaz de hacer un drama que sorprende y logra crear consciencia sobre un tema tan escabroso como la pedofilia.
En La Perdida de la Inocencia vemos como una chica de 14 años entabla amistad por internet con alguien que ella cree de su edad y que se revela finalmente como un hombre de 35 años, que la lleva a tener relaciones sexuales con él, como lo ha hecho con diversas adolescentes. Cuando su familia se entera su mundo se colapsa así como sus relaciones con ellos.
Un drama que se centra en lo que su título original anuncia, la confianza. ¿Cómo confiar en tus amigos que traicionan tu secreto? ¿Cómo confiar en tus hijos que contra tu confianza y lógica se ven con desconocidos con resultados brutales? ¿Cómo confiar en tus padres que no entienden lo que es enamorarte a través del internet?
Si bien el tema central es la confianza también se toca el de la seguridad on line, el cómo tener acceso a nuevas formas de comunicación nos está alejando más y más del contacto real con los demás y consigue hacer a los niños y adolescentes víctimas más sencillas para los depredadores que buscan abusar de ellos. Y no hay que pensar el internet es la madre de todas las culpas, es sólo otra herramienta que se usa.
La dirección de Schwimmer es fascinante y para lograr sus objetivos se apoya en un guión de Andy Bellin, Robert Festinger y que tiene aportaciones suyas sin crédito en pantalla, solvente y que no cae en la moralina, la roza, la toca, pero resiste la fascinación de ser marcial y prefiere alejarse de discursos morales.
Es muy importante también la elección de Liana Liberato como la adolescente seducida por el adulto, su interpretación es fascinante, dolorosa, cándida, fue premiada como Mejor Actriz en el Festival Internacional de Cine de Chicago y nominada como Actriz más Prometedora por parte de la Asociación de Críticos del mismo festival. La acompañan Clive Owen, Catherine Keener, Viola Davis y Chris Henry Coffey quien interpreta al pedófilo.
Una película obligada para todos aquellos que piensan que el internet es seguro y que los menores no requieren cierta supervisión al estar navegando en él, así como para que recuerden que la confianza familiar debe ser primordial para evitar a los depredadores.