Entre sombras, la vida como un sueño

entre sombras criticaEric y Mari tienen vidas complicadas pero cuando se conocen les es imposible alejarse el uno del otro, sin importar las complicaciones que trae el estar juntos, Eric decide que Mari es la mujer con la que quiere pasar su vida. Todo es un sueño hecho realidad, hasta que Mari sufre un infarto y queda en coma por varios días. A partir de ese momento todo cambia, un secreto que salé a la luz hará que Mari cambie completamente, y lo que parecía ser una relación perfecta se derrumbará hasta desaparecer.

Entre Sombras es la opera prima de Tony Wakefield y cuenta con las actuaciones de Raúl Méndez, Patricia Garza y Salvador Sánchez. La película busca darle al público una cinta “compleja, interesante, que no le de todo digerido al público”, esto dicho por los actores y su director. Sin embargo, la cinta es un desastre desde que no logra encontrar el centro de lo que se trata.

A pesar de que Wakefield y los actores parecen estar seguros de la temática de la película, al menos así pareció durante la conferencia de prensa, la cinta no refleja lo dicho ni por sus protagonistas ni por su director. Entre Sombras intenta ser un thriller sobrenatural en donde lo que vemos no es real, en donde el espectador tendrá que armar el rompecabezas, sin embargo para que un rompecabezas pueda ser armado, todas las piezas tienen que encajar a la perfección y esto no sucede en la película.

La cinta empieza como una película cursi dónde el enamorado tiene que superar la muerte del amor de su vida, sin embargo la cinta va intercalando el presente con el pasado e incluye a un personaje que hace que la trama vaya tomando un camino completamente diferente. Y el problema no es el cambio en género o en la trama, sino que en este caso no tuvieron la suerte de saber ligarlo y hace que la película se siente como dos películas forzadas a estar en un mismo lugar.

Entre Sombras no logra tener una identidad propia, y es que para que en una historia puedas mezclar géneros se necesita habilidad o sino la historia se queda en el limbo, cosa que sucede en esta ocasión y que tiene como cierre un final gratuito y absurdo.

La cinta de Wakefield se va haciendo pedazos conforme avanza la trama y no por ser compleja sino precisamente la falta de una historia que se logre sostener.  Entre Sombras hace que la trama llegue a ser risible y que caiga en lugares comunes como el personaje de Salvador Sánchez quien con su etiqueta de “agente de viajes” es claro que es más que eso.

Aún con todas las buenas intenciones y el esfuerzo de los involucrados, la cinta no se defiende por sí sola. Entre Sombras se queda en el limbo de la narrativa visual y escrita. 


Imprimir   Correo electrónico