Carlo Rambaldi, mago de los efectos especiales, falleció este viernes a los 86 años en Lamezia Terme (Calabria, sur de Italia), donde residía, informaron fuentes locales. Él fue el creador de criaturas para cine de la talla de Alien y E.T.
Nacido el 15 de septiembre de 1925 en Vigarano Mainarda, cerca de Ferrara, en el nordeste de Italia, se formó en la Academia de Bellas Artes de Bolonia, donde empezó a trabajar con el mundo del cine en la década de los 50, al realizar un dragón gigante de 16 metros para el filme Sigfrido de Giacomo Gentilomo.
Ganador de dos Oscar por Alien y E.T., Rambaldi era considerado el mago de los efectos especiales, recordó el asesor a la cultura de Calabria, Mario Caligiuri, al anunciar su muerte. También obtuvo en 1976 un Premio Especial de la Academia de Ciencias y Artes Cinematográficas de Hollywood por su trabajo en King Kong de John Guillermin.
Rambaldi también trabajo en cintas como Rojo Profundo (Profondo Roso Dario Argento 1975), Encuentros Cercanos del Tercer Tipo (Close Encounters of the Third Kind Steven Spielberg1977), Dunas (Dune David Lynch 1984).
Entre sus rarezas se encuentra el haber sido el primer artista de efectos especiales en haber sido convocado para probar que su trabajo era ficción y no algo real debido a que en el film Una lucertola con la pelle di donna (Lucio Fulci 1971) muestra una brutal mutilación de un perro que fue considerado demasiado realista para ser un efecto, lo que ocasionó que el director fuera llevado a juicio por crueldad animal, acusación que sólo se detuvo cuando Rambaldi demostró en la corte como había logrado hacer las escenas.
