Críticas
El Matrimonio Loving, luchando por el amor
La nueva cinta de Jeff Nichols, El Matrimonio Loving (Loving) se sitúa en 1958, Washington, EUA. Un joven trabajador de la construcción, Richard Loving, se casa con Mildred. Ambos son arrestados horas después, al regresar a su estado natal, Virginia, por haberlo hecho. ¿La razón? Son una pareja interracial, esa boda es un delito, sus hijos serían considerados bastardos y podrían ser condenados a 20 años de prisión a menos que abandonen su estado. Ambos lo hacen, pero meses después regresan, porque ella está embarazada y quiere que su hijo nazca en el lugar donde ella ha vivido: la policía les arresta otra vez. Por un tecnicismo legal, su abogado logra que los dejen libre y los corren de nuevo.
Café Society, el lugar para reencontrarse con uno mismo
El duelo es tratar de reconciliarse con alguien que se ha ido y se ha llevado una parte importante de uno mismo. La sofisticada, irónica y cruel visión del último filme de Woody Allen sobre el amor y la pérdida de la inocencia en la era dorada de Hollywood, Café Society,hace que Bobby, nuestro personaje principal (un neoyorquino bobo aunque avispado interpretado por Jesse Esenberg), deje y regrese a Nueva York buscando su sueño -y perdiéndolo después-, bajo el patrocinio de su tío, Phil Stern, un poderoso agente de artistas (el lacónico Steve Carrell), quien es también, sin que ninguno de los dos lo sepa, su rival de amores.
Resurrección, en espera de la llegada del tercer día
Eugenio Polgovsky nos presenta en su nuevo documental un caso de contaminación que ocurre en la cascada de El Salto de Juanacatlán, Jalisco, la cual era conocida como “el Niágara mexicano”, poseedora de un desnivel de 20 metros, perdiendo su encanto y fuerza a partir de la década de los 70 cuando se instaló un corredor industrial a sus orillas, el cual utilizó el río como vertedero de sus contaminantes.
Polgovsky nos lleva a recorrer la zona a través de los recuerdos de los habitantes de la zona, los cuales rememoran su infancia en un lugar lleno de luz y vida, donde la pesca y el uso de agua potable directa del río era la fuente de trabajo y alimento del lugar, perdiendo todo ello con la fábricas que si bien reclutaron a la gente local para su mano de obra, también se llevó todo lo demás.
La Caja Vacía, cuando el cuerpo queda sin recuerdos
Claudia Sainte-Luce nos lleva en esta ocasión por el doloroso viaje de una mujer que debe sobreponerse a la pérdida paterna en vida de la persona, al ir está dejando atrás la memoria y perderse en un mundo que no conoce a nadie. Tras la alegre y acogedora cinta Los Insólitos Peces Gato (2013), la directora ahora decide incursionar en un terreno más oscuro y menos optimista, pero igual de entrañable.
Jazmín vive alejada de su padre, Toussaint, un haitiano de 60 años, cuando éste sufre un accidente laboral y ella debe hacerse cargo con él, descubre que la demencia cardiovascular comienza a hacer estragos, lo que complica su relación pero a la vez les acerca.
El sueño del Mara’akame, encontrando el camino en lo onírico
El cine etnográfico suele ser demasiado denso, aburrido, hecho para investigadores y conocedores del tema, sin interesarse en atraer a nuevas audiencias a él, condenado a documentales pedantes en la mayoría de los casos y con tendencia al paternalismo o el otro extremo de encumbrar de forma desmesurada lo que retrata, por lo que ver El Sueño del Mara’akame es una bofetada de frescura en este tipo de cine.
Nieri es un joven indígena huichol, su máxima ilusión es viajar con su banda musical a tocar en un concierto en la gran ciudad de México. Su padre, que es un Mara’akame (chamán huichol), tiene otros planes para él, pues debe seguir su tradición y encontrar al Venado Azul en sus sueños, para así poder aprender a sanar y convertirse en su sucesor. Cuando acompaña a su padre a la ciudad de México las cosas le revelarán cosas que le hacen entender su mundo.