Críticas
Armados y Peligrosos, Denzel y Mark juntos son dinamita
Denzel Washington y Mark Wahlberg protagonizan una de las cintas más divertidas del 2013, Armados y Peligrosos (2 Guns) dirigida por Baltasar Kormákur quien nos trajera ya Contrabando (Contraband 2012) y quien estuviera nominado al Oscar a Mejor Película Extranjera por Djúpið filmada en su natal Islandia.
Un par de contrabandistas se involucran con un poderoso narco mexicano para pasar drogas a los Estados Unidos, cuando deciden robar un banco donde éste deposita su dinero para meterlo en aprietos, descubren que el lugar es una fachada para esconder depósitos millonarios a la CIA. Todo se complica cuando ellos se enteran de que uno es miembro de la DEA y otro pertenece a la Inteligencia de la Marina. Todo conduce a un final donde sólo quedará en pie el más hábil con las pistolas.
El niño que huele a pez, siempre hay un roto para un descosido
Ópera prima de la directora mexicana Analeine Cal y Mayor, El niño que huele a pez es una cinta mágica que muestra a través de un personaje inadaptado y excluido de la sociedad que no importa que tan raro uno sea, existe alguien igual de extraño que podrá aceptar las rarezas de uno.
La Caída de Roland Emmerich en la Casa Blanca
Un comando toma por asalto la Casa Blanca, el presidente esta vulnerable y será una persona que no está en su escolta quien le salvará la vida y de paso le ayudará a lanzar patéticas arengas patrióticas para asegurar que los Estados Unidos son el vigilante y salvaguarda del universo. ¿Dónde lo hemos visto antes? Ah sí, ya recuerdo, en Olimpo bajo fuego (Olympus has fallen Fuqua) estrenada unos meses atrás y que tiene mucho mejor ritmo que esta versión llamada La Caída de la Casa Blanca (White House Down) y dirigida por el antes eficaz Roland Emmerich.
Si bien Roland regresa a lo que mejor sabe hacer y le ha resultado en su carrera, destruir la Casa Blanca, en esta ocasión hasta esa desacralización es light, sólo un pretexto para citar ID4 sin esa fuerza visual. Emmerich continúa sin crear una cinta donde el ritmo no se caiga y en muchas ocasiones cae en el humor involuntario ante las vergonzosas escenas transcurren en pantalla.
Juego de Niños, ese juego no me gusta matarile rile ron
Canana incursiona en la producción de cine de terror con el remake de la cinta española ¿Quién Puede Matar a un Niño? (Ibañez 1976), dirigida en esta ocasión por Makinov, ¿un anónimo director? al que se le ha creado toda una leyenda atrás para ocultar su identidad y, de paso, ocultar a quien endilgar la ineficacia de la cinta Juego de Niños, donde el verdadero terror está en la falta de dirección.
Un matrimonio de viaje por Cancún decide ir a una isla que él conoce para pasar momentos tranquilos y apacibles. A su llegada a la isla descubre que los adultos han sido asesinados por los niños del lugar, quienes pronto se pondrán a cazarles sin tregua. Los niños se comunican entre ellos por medio de la mirada y al tocar a otros niños los convencen de que los adultos deben ser eliminados.
¿Quién *&$%! son los Miller?, una no tan típica comedia gringa
Un narcomenudista se ve en problemas cuando le roban no sólo su dotación de droga a vender sino las ganancias ya recolectadas, su jefe para perdonarle la vida le pide viaje a México y cruce a Estados Unidos un poco de marihuana. Para despistar a los oficiales de la aduana contrata a una stripper, a una vagabunda y su vecino adolescente para que finjan ser una familia y así no despierten sospechas. Cuando la pequeña cantidad resultan dos toneladas y se descubre que fue utilizado para robársela a un cartel mexicano, los resultados se salen de control.
¿Quién *&$%! son los Miller? (We’re The Millers) es la nueva comedia de Rawson Marshall Thurber quien ya nos diera la divertida Dodgeball: A True Underdog Story (2004) y quien de nueva cuenta recurre al humor crudo y sin miramientos para burlarse de la cultura norteamericana y la forma en que ven su entorno y el mundo. ¿Quién chingados son los Miller? es una cinta políticamente incorrecta, no busca crear empatía con la gente por medio de presentar personas agradables sino busca que esa relación se dé por su comportamiento honesto consigo mismas y por representar lo más patético del white trash norteamericano.