Críticas
La vida secreta de tus mascotas 2, lo único que se necesita es amistad y valor
En la segunda entrega de “La vida secreta de tus mascotas 2” nos reencontramos con los personajes de la primera cinta, en esta ocasión estos adorables y esponjosos animales se enfrentarán a diversas situaciones que los pondrán a prueba y tendrán que aprender a superar sus miedos, a tomar decisiones en equipo, a entender que las cosas cambian y uno debe aprender a adaptarse.
A pesar de ser la continuación de “La vida secreta de tus mascotas”, esta segunda entrega cuenta con historias independientes a su antecesora, lo cual permite al espectador de disfrutar de la cinta sin necesidad de haber visto la primera entrega. Esto permita a “La vida secreta de tus mascotas 2” el poder crear público nuevo ya sea de los adultos que acompañan a los pequeños y de niños que aún no hayan visto la primera cinta.
La película está dirigida por Chris Renaud, con música de Alexandre Desplat y la participación en inglés de Patton Oswalt, Kevin Hart, Harrison Ford, Jenny Slate, Ellie Kemper, entre otros. En el doblaje para México se contó con la participación de Andrés López, Martín Campilongo, Eugenio Derbez, Mónica Huarte, Natasha Dupeyron, Ana María Simón, Jesús Ochoa, Chumel Torres, entre otros.
“Apocalipsis Zombie” un desastre típico
El cine de horror se guía por reglas básicas, las cuales se pueden torcer, se pueden romper, se pueden seguir al pie de la regla, se pueden reinventar, pero no se pueden traicionar, cuando eso sucede las películas están condenadas a no poder conectar con el público que les sigue y que desea espantarse al verlas, eso es lo que le sucede a la cinta “Apocalipsis Zombie” (Redcon-1), la cual adolece no por su ínfimo presupuesto, sino por su interés de reinventar el hilo negro fracasando en el camino.
Cuando un experimento se sale de control provocando que aquellos que mueren se transformen en muertos vivientes, el ejército logra contenerles en una zona, la cual será destruida pronto, por lo que se envía un grupo de soldados para rescatar a un científico que podría tener la clave para erradicar la enfermedad. Lo que no esperan es encontrar que los muertos vivientes han evolucionado y han desarrollado una gran inteligencia, haciéndoles presas de sus instintos a todos aquellos humanos se atraviesan en su camino.
“Infierno en la Tormenta”, ahí nos vemos cocodrilo
Alexandre Aja es un director de altibajos, cierto, más bajos que altos pero que ha logrado crear un estilo propio el cual le imprimen a sus cintas una atmósfera apabullante que ya quisieran poder desarrollar otros directores en el género de terror, ahora en su nueva aventura hollywoodense une esfuerzos con Sam Raimi, haciendo de “Infierno en la Tormenta” (Crawl) una trepidante cinta llena de emociones, sobresaltos y una fina capa de comedia que le vuelven irresistible a los ojos de los amantes del género.
Florida está a punto de ser azotada por un huracán categoría cinco, por lo que los residentes de la zona afectada preparan su evacuación. Haley Keller, una estudiante de la universidad becada por sus actividades de natación, debe acudir a la antigua casa para buscar a su padre, quien se encuentra atrapado en el sótano, acosado por un gigantesco cocodrilo.
“Ted Bundy: Durmiendo con el asesino” y con toda la sala de cine
Theodore Robert Bundy es uno de los asesinos en serie más interesantes del siglo pasado, dueño de una monstruosa personalidad, su carisma le llevo a cometer 20 asesinatos confirmados, aunque se especula que la cifra real podría rondar el centenar de víctimas. Sobre él se han escrito diversos libros y su historia ha sido llevada a la pantalla en otro tanto de ocasiones, siendo la más reciente “Ted Bundy: Durmiendo con el asesino” (Extremely Wicked, Shockingly Evil and Vile), la cual podría ser fácilmente, una de las peores se ha hecho sobre el tema.
En 1969 Ted Bundy conoce a Liz Kendall, madre soltera con la que inicia una relación. En 1974 él es arrestado por sospecha de intento de secuestro, con lo que inicia una espiral descendente que le hace ver a ella que quizá no lo conoce en realidad, mientras se van acumulando pruebas de su participación en diversos crímenes.
“Ted Bundy: Durmiendo con el asesino” es dirigida por Joe Berlinger autor también de la serie de Netflix “Conversations with a Killer: The Ted Bundy Tapes”, las cuales podrían complementarse una a la otra, siendo eso un terrible error al no dejar que la cinta de ficción funcione por su cuenta, haciendo que un espectador ocasional que no sepa nada de la figura de Bundy se confunda, se pierda, se aburra con facilidad… bueno hasta aquellos que conocen la historia y pormenores del caso se aburrirían, eso es cierto, la cinta fracasa miserablemente en ser algo interesante, fracasa al no atreverse a ser una película sobre asesinos en serie, al no atreverse a ser un drama sobre cómo se descubre que quien amas no es quien crees es, al no ser una cinta sobre un juicio, al no ser nada y querer ser todo.
“Rápidos y Furiosos: Hobbs & Shaw” hay más familia en otros lados
La franquicia de “Rápidos y Furiosos” ha sido una de las más exitosas de los últimos años, lejos ha quedado, esos sí, los robos callejeros que motivaron la primera cinta de la franquicia en el 2001 para adentrarse en estrambóticas aventuras, llenas de efectos especiales, tecnología y situaciones cada vez más inverosímiles pero que siguen cautivando a una audiencia cautiva que espera ya cada dos años su cinta sobre la familia Toretto, aunque en este 2019 lo que se nos ofrece es el primer spin off de la saga, uno centrado en dos personas que desde que aparecieron en pantalla cautivaron a todos, el agente federal Hobbs y el mercenario Shaw, “Rápidos y Furiosos: Hobbs & Shaw” (Fast & Furious Presents: Hobbs & Shaw),
Cuando la hermana de Deckard Shaw, Hattie es incriminada en el robo de un virus, éste y Luke Hobbs son enviados para detenerla, descubriendo un complot que involucra a una empresa de alta tecnología que ha modificado a un ex agente para volverlo casi indestructible. La única forma de detenerle será llevando la lucha a un terreno donde puedan tener ventaja, aunque eso implique conocer a la familia samoana de Hobbs.