2025

“El Contador 2” dos hermanos explosivos en pantalla

 

En 2016 Ben Affleck encontraría en Christian Wolff “El Contador” (The Accountant) uno de sus mejores personajes al día de hoy, uno que saca gran partido a su rostro, quien, con pocos diálogos y aún menores expresiones faciales, logra transmitir mucho más que en otras ocasiones. Ahora, nueve años después regresa con él y, afortunadamente, no es una calca de la cinta anterior, ahora el personaje ha evolucionado y ya ha desarrollado cierto sentido del humor y una necesidad de contacto humano que le hace aún más entrañable.

Cuando Raymond King es asesinado, sólo los conocimientos de Christian Wolff podrán ayudar a encontrar a sus asesinos, su investigación le hará reencontrarse con su hermano y, juntos, deberán frenar a un sádico tratante de blancas que no parará para consolidar sus ganancias.

“Pecadores” porque la música es el instrumento del diablo

Uno de los géneros musicales más importantes es el blues, melodía para el alma atormentada, creadora de sentimientos de melancolía y tristeza, de dolor inmenso, creada en sus inicios por los afroamericanos y disfrutada y entendida por ellos, quienes encontraban en este ritmo un escape a la forma el mundo cercano los oprimía y los destruía. Cuenta la leyenda que quien quería volverse músico de blues, cerca de la media noche, debe ir a un cruce caminos y tocar, tocar hasta que aparecía el hombre de negro, quien les quitará la guitarra, la afinará y se las devolverá, y cuando el aspirante la tome y toque, habrá vendido así su alma a diablo. Es quizá por eso que en la cinta “Pecadores” (Sinners) de Ryan Coogler no se haga extraño que se diga que el blues abre portales y dimensiones.

“El Amateur: Operación Venganza" un efectivo thriller de espionaje

El cine de espías puede irse en muchas vertientes, siendo la más exitosa aquella que trata de emular las aventuras del inglés Bond, 007, la que se va a las impresionantes secuencias de acción, a los gadgets más espectaculares, pero también están aquellas que buscan construir una historia de una forma más lenta, creando las tensiones sobre la atmósfera enrarecida de la lucha entre naciones y organizaciones, es en esta última donde se inscribe “El Amateur: Operación Venganza” (The Amateur).

Cuando su esposa es asesinada en un acto terrorista, el analista Charlie Heller decide tomar la venganza en sus manos, por lo que aprovecha sus conocimientos para ir cazando a los involucrados, en un acto que le lleva a descubrir acciones deshonestas de la CIA.

“Drop: Amenaza Anónima” una opción palomera y entretenida

Christopher Landon ha sabido hacerse un espacio en Hollywood gracias a la capacidad que tiene como nrrador detrás de la cámara y con una pluma. Comenzando a tener éxito como guionista al hacer una versión libre de “La Ventana Indiscreta” de Alfred Hitchcock con “Paranoia” (Caruso, 2007), además de inyectarle nueva vida a la franquicia de “Actividad Paranormal”, pero fue hasta “A la Chi%$*da con los Zombies” (Scouts Guide to the Zombie Apocalypse, 2015) así como las comedias slasher “Feliz Día de tu Muerte” (2017), su secuela y “Freaky” (2020), que este experimentado guionista y realizador mostró lo bueno que es para combinar comedia con diversos géneros como el thriller, el slasher y hasta la ciencia ficción.

Ahora, de la mano de Blumhouse, que ha dado sendos tropezones con sus últimos estrenos como la terrible “Parano-IA” (Afraid, 2024), la reimaginación aburrida del “Hombre Lobo” (Wolf Man, 2025), la inexplicable “Aguas Siniestras” (Night Swim, 2024) o la horrenda continación del legado de William Friedking con “El Exorcista: Creyentes” (The Exorcist: Believer, 2023), llega Landon a entregar una decente y bastante entretenida cinta con “Drop: Amenaza Anónima” (Drop), donde nuevamente esa mezcla de géneros le rinde frutos gracias no tanto a un guion sólido sino a su capacidad como director.

“Kaiju No. 8: Misión de Reconocimiento” una buena adaptación a la pantalla grande

Si existe una criatura que, por excelencia, forma parte de la cultura japonesa y ha impactado a todo el mundo, esos son los kaiju, concepto que encierra a todos aquellos mosntruos gigantes que, después del estreno de “Godzilla” en 1954, dejarían una huella imborrable. Y aunque esas criaturas han aparecido en todo tipo de mangas y animes, jamás hubo uno que tuviera un enfoque similar a “Kaiju No. 8”, manga japonés escrito e ilustrado por Naoya Matsumoto que comenzó a publicarse en julio de 2020 gracias a Shonen Jump.

Con más de 8 millones de copias en circulación en el mundo, el popular manga creado por Matsumoto ha recibido elgoios por su historia, arte y personajes, no tardó en convertirse en una gran propuesta para llevarlo al terreno del anime. Fue así que se creó la serie animada creada por el estudio Production I.G. y Studio Khara. Dirigida por Shigeyuki Miya (“Supernatural: The Animation”, “Lupin III: Green vs Red”) y Tomomi Kamiya (Yotsuiro Biyuri), llegó a 2024 para ser una de las propuestas de primavera/verano más llamativas.

“Cocodrilos” la amenaza contra la libertad de expresión

En México la actividad periodística que tiene que ver con la cobertura de política y actos del crimen organizado se ha convertido en una de las profesiones más peligrosas a desarrollar, el país ocupó el tercer lugar mundial en asesinatos de periodistas durante el 2024, sólo detrás de Palestina y Pakistán, y eso solo en cifras oficiales y aceptadas como crímenes. Uno de los estados de la República más peligrosos en los últimos años ha demostrados ser Veracruz, con asesinatos que han llegado hasta ser perpetrados contra comunicadores ya en el exilio en la Ciudad de México. Para abonar en la discusión del tema, llega la cinta “Cocodrilos”, opera prima de J. Xavier Velazco.

Cuando su mentora es asesinada tras estar investigando sobre la forma de operar del crimen organizado en el estado de Veracruz, el fotorreportero Santiago Ortiz retoma esa labor, sólo para irse adentro en un monstruo siempre presente y que no se detiene para evitar se divulgue lo que hace.

“El ultimo viaje” un entrañable recuerdo de vida

Para mi abuela, que me regaló un viaje de 40 años a su lado. Gracias por todo.

 

Hay lazos de familia que son duros de romper, como el de padre e hijo. Pero es la inevitabilidad del paso del tiempo y la vejez la que nos condena a tener que aprender a soltar poco a poco y valorar cada momento, cada instante al lado de nuestros seres más queridos. Puede ser a través de pláticas largas o, a veces, de un viaje en búsqueda de lo que alguna vez fue el sueño de la vida de nuestros progenitores. Tal es el caso de “El Último Viaje” (Den sista resan), un conmovedor e hilarante documental en donde Filip Hammar aprovecha para darle una inyección de vida a su octogenario padre, Lars.

La belleza de este relato radica en cómo esa convivencia entre ambos crece, pero también enfrenta momentos duros, todo esto mientras Filip asimila y acepta lo inevitable: su padre ya no podrá ser el de antes mientras el tiempo nos prepara para dar el último gran viaje. Dirigida por él y su gran amigo, Fredrik Wikingsson, la cámara captura todos los pormenores del regreso de Lars a su amada costa francesa, lugar donde solía pasar sus días festivos.

“Una Película de Minecraft” demasiado infantil para trascender

Llegó a cines una adaptación más de un videojuego bastante popular. De la mano del director Jared Hess (“Napoleón Dinamita”, 2004), llega su segunda colaboración con el comediante y músico Jack Black desde “Nacho Libre” con “Una Película de Minecraft” (A Minecraft Movie), que lamentablemente resulta ser una cinta que pinta para competir por lo peor de este año en un filme que tiene la capacidad de desaprovechar por completo el carisma y gracia de Black con una historia que nunca existe en un exasperante viaje de casi dos horas.

La trama se centra en Steve (Black), un chavo que desea ser minero a toda costa, pero no puede serlo hasta que un día, deja su aburrida oficina godín para cumplir el sueño de minar. Ahí, encuentra un orbe mágico, un cubo de color azul que lo lleva al Overworld, universo donde uno puede crear lo que quiera con, pues si, cubos. Pero la malvada bruja Malgosha busca acabar con ese mundo de imaginación y tomar el orbe, por lo que secuestra a Steve, quien le encarga a su lobo esconder el objeto en el mundo real. Y eso ocurre en diez minutos.

“Goya” la familia es donde esta el corazón

Dentro del cine mexicano actual hay uno que se empeña en crear películas con argumentos mínimos que darían pie a un gran cortometraje, el cual al alargarse pierde parte de su encanto, tal es el caso de “Goya” una entrañable cinta que narra la relación de dos hermanos y una perra abandonada por su dueño, quienes logran unirse ante las adversidades.

César y Mateo son dos hermanos cuyos planes de pasar un día de diversiones se ven frustrados por la enfermedad de Goya, la perrita de su vecino. Con la ayuda de Camila, una de sus vecinas, inician un viaje para poder rescatar a Goya de su suerte.

“Peter Pan: Pesadilla en la Tierra de Nunca Jamás” un viaje al perverso mundo de hadas

La productora británica Jagged Edge, liderada por Scott Chambers y Rhys Frake-Waterfield, continúa con lo prometido en su universo lleno de reinvenciones de terror de aquellos personajes clásicos de cuentos de hadas en vías de continuar con la construcción del denominado Twisted Childhood Universe que comenzó con “Winnie Pooh: Miel y Sangre” y su respectiva secuela, dándole un instinto asesino a lo Jason Voorhees y Freddy Krueger al oso adorable y el tigre saltarín.

Ahora, toca el turno de ir sobre la obra de J.M. Barrie, Peter Pan, ahora renombrada “Peter Pan: Pesadilla en la Tierra de Nunca Jamás”(Peter Pan's Neverland Nightmare), donde el mundo mágico en el que los jovenes no crecían se convierte en tremenda pesadilla psicótica de un payaso de circo adicto a las drogas y víctima de abuso por parte de su familia que encuentra en la fábula de Pan su vía de escape a las atrocidades del mundo.

“Blanca Nieves” y el desastre de lo políticamente correcto

Érase una vez una casa productora que decidió arriesgarse a hacer un largometraje animado en le lejano año de 1937. De la mano de Walt Disney, llegó entonces la princesa “Blanca Nieves y sus Siete Enanos” a robarse los corazones de la audiencia. Inspirada en el cuento de los hermanos Grimm fue todo un parteaguas para el cine por sus innovadoras técnicas de animación, comenzando una conocida época de oro para estos proyectos que usarían la fórmula de la adaptación de cuentos de hadas para continuar creciendo.

Casi un siglo después y con miles de adaptaciones inspiradas en este cuento, Disney continúa con su afán de volver clásicos animados en live actions para nuevas generaciones. Y ahora tocaba el turno a la primera princesa de la empresa, Blanca Nieves, de tomar ese riesgo. Siendo Rachel Zegler la elegida para encarnar a la adorable princesa y Gal Gadot como la Reina bruja malvada del reino, la cinta se envolvió en muchas polémicas previo a su produccióny estreno.

“Memorias de un caracol”, un emotivo drama animado

La animación hace mucho que dejó de ser territorio casi exclusivo de relatos infantiles y ha sido utilizada para narrar historias cuya profundidad y sentimiento sólo puede ser comprendida en su totalidad por un público más adulto, tal es el caso de “Memorias de un Caracol” (Memoir of a Snail) un drama demoledor que no deja a nadie sin ser tocado por alguno de sus temas.

En Melbourne, Australia nos encontramos a Grace Pudel, una chica que crece con su padre y su hermano, a la muerte del primero ellos son separados y enviados a hogares sustitutos. Ella crece con una familia que si bien la apoya nunca logra integrarla por completo mientras su hermano termina en una granja con fanáticos religiosos. Al paso de los años Grace se va aislando cada vez más del mundo hasta que conoce a Pinky, una mujer madura que le terminará mostrando el mundo es un lugar para explorar y, sobre todo, vivir.

“1938. Cuando el petróleo fue nuestro” una rancia estampita histórica

El cine histórico mexicano siempre ha sufrido del mismo problema, cuando representa figuras reales de la historia las convierte en esfinges que no tienen vida, que hablan a través de frases prefabricadas, sesudamente creadas para demostrar su capacidad intelectual, seres de libros y no reales, por lo que no es de extrañar que “1938: Cuando el petróleo fue nuestro” la nueva cinta de Sergio Olhovich sufra de ese mismo problema.

El presidente Lázaro Cárdenas debe tomar medidas extremas contra las compañías petroleras que explotan el país, las cuales no sólo usan táctica gangsteriles contra los trabajadores y habitantes de la zona, sino que buscan subordinar al gobierno a sus deseos.

Sergio Olhovich es un director forjado en la escuela rusa y sus intereses cinematográficos tienen que ver con la eterna lucha de clases y la grandilocuencia en pantalla, a veces con grandes resultados como en “Llovizna” o “Esperanza” y en otros con resultados muy cuestionables, como es en esta, su más reciente película, la cual es en realidad tres películas en una, las cuales no logran hacer un trabajo que sobrepase la estampita escolar.

“Contraataque” un efectivo thriller de acción mexicano

Lejos del arte miseria y la comedia romántica el cine mexicano comienza cada vez más a explorar terrenos que no le son tan comunes, llegando el turno ahora a “Contraataque” una cinta de acción/aventuras ambientada en la lucha que mantiene el crimen organizado contra aquellos que se le enfrentan, creando una sorpresiva cinta que logra atrapar la atención del espectador mientras la trama se va desarrollando.

Una célula de las Fuerzas Especiales del Ejército Mexicano es emboscada en la carretera, obligándoles a replegarse y huir a través de la sierra mientras son perseguidos por aquellos que buscan destruirlos. En su camino seremos testigos de su fortaleza, de su entrenamiento y de su vocación de servicio para ayudar a los civiles que se encuentran en el camino.